Abuso policial en Oliva: cuando la excepción pone en cuestión al sistema.

El reciente caso de Oliva (Valencia), en el que un agente de la Guardia Civil fue grabado agrediendo a una mujer esposada e indefensa, ha reabierto un debate tan incómodo como necesario: ¿por qué se siguen produciendo episodios de abuso policial en sociedades democráticas como la nuestra? La violencia desproporcionada mostrada en el vídeo no es un simple “exceso” individual, es un síntoma de un problema más amplio que requiere mirarse de frente. ¿Por qué sucede? Falta de control interno eficaz Aunque los cuerpos de seguridad cuentan con protocolos disciplinarios, la realidad es que muchos abusos quedan invisibilizados porque rara vez salen a la luz pública. En este caso, de no haberse difundido el vídeo en redes sociales, probablemente no se habría actuado con la misma rapidez. Cultura corporativista Existe una tendencia a proteger la imagen del cuerpo antes que a depurar responsabilidades. Esa mentalidad de “cerrar filas” alimenta la impunidad y erosiona la confianza ciudadana. ...