PASADO, PRESENTE Y FUTURO.

 

En el paraninfo de la Escuela de Ingenierías Industriales de la UMA y organizada por la Cátedra Estratégica de Seguridad, Emergencias y Catástrofes de la Universidad de Málaga, el pasado 19 de noviembre se celebró una jornada conmemorativa del 40 aniversario de la legalización del sindicalismo en el Cuerpo Nacional de Policía, en un acto coordinado por el Dr. Pedro Pacheco Martín bajo el título de "PASADO, PRESENTE Y FUTURO DEL SINDICALISMO EN LAS FUERZAS Y CUERPOS DE SEGURIDAD DEL ESTADO", con asistencia de históricos de la lucha sindical clandestina.

Interesante jornada cuya síntesis podría ser; referente al sindicalismo y asociacionismo del pasado y el presente "cómo un huevo y una castaña" en palabras de José López -cofundador del SUP-, "el pasado es historia, ahora reto de futuro" en palabras del periodista moderador del acto Juan de Dios Mellado.

Un grupo de profesionales de la Guardia Civil emergió un sindicato de la Guardia Civil en la clandestinidad, que se dio a conocer mediante una carta manifiesto dirigida al Presidente del Gobierno y reproducida en prensa -véase Diario 16 del 21 de junio de 1983- expresando su más sentida reivindicación: la desmilitarización del Cuerpo.

La Ley de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado de 1986 enfatiza con el término "naturaleza" el Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil, civil y militar respectivamente.

El uso del término naturaleza  en expresiones como "cuerpo de policía nacional de naturaleza civil" tiene un propósito conceptual y jurídico. Su sentido radica en describir las características esenciales y distintivas del cuerpo, destacando aspectos que lo diferencian de otras instituciones similares y definiendo su marco de actuación dentro del sistema de seguridad pública. A continuación, analizamos el sentido y las implicaciones del término en este contexto. Naturaleza como jurídica y funcional. En el ámbito legal y administrativo, el término "naturaleza" se utiliza para describir a la esencia jurídica, organizativa y funcional de una institución. En el caso de un "cuerpo de policía nacional de naturaleza civil", la palabra enfatiza lo siguiente: Esencia no militar: Al decir que la policía tiene "naturaleza civil", se subraya que no está organizada ni regida bajo un marco militar, sino que opera en un marco estrictamente civil, sometida a principios democráticos y al derecho administrativo o penal común. Esto contrasta, por ejemplo, con cuerpos como la Guardia Civil, que tiene un carácter militar.

La Guardia Civil refleja aspectos híbridos, con raíces en lo militar formal, pero con destellos de la esencia que caracterizan a un cuerpo de naturaleza militar, especialmente en su compromiso con la proximidad y el servicio público. Fue la Ley de 18 de marzo de 1940 la que otorgó a la Guardia Civil la condición de Fuerza estrictamente militar, con mando, fuero y disciplina militar, situando al frente de la misma a un oficial general del Ejército de Tierra.

Algún día se reconocerá que la eficacia sólo se consigue mejorando las relaciones de personal y las condiciones de trabajo.

Parece constatado el declive sindical y asociativo en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, han perdido la capacidad para conseguir sus objetivos. El sindicalismo tiene que volver a ser una herramienta de lucha reivindicativa, volver a ser un espacio de lucha colectiva por derechos laborales. El lema sindical de hoy en día bien podría ser: "Atraer más afiliados ofreciendo los mejores descuentos". ¿Cuándo un sindicato dejó de ser un escudo para transformarse en un bazar? Y en su fervor por las promociones, olvidaron el descuento más importante: el que habían aplicado a la dignidad de su propia causa.

Entre las propuestas de mejoría de los sindicatos, tener más presencia en los centros de trabajo, que sus acciones se dirijan a los ámbitos nacional e internacional, mejorar y aumentar los servicios para sus afiliados. Estudiar los problemas laborales que presentan, y elaborar estrategias de acción específicas para llegar a trabajadores para conseguir su confianza y defender sus intereses. En definitiva, que los sindicatos y asociaciones vuelvan a sus raíces históricas, para lograr atraer a aquellos trabajadores con menor tradición sindical.

El esclarecimiento de la “Operación Columna” símbolo de la represión, también se consideró en la jornada, las acciones de la Guardia Civil hace unas décadas son una mancha a nuestros valores y a nuestra historia. La historia nos juzgará por nuestro compromiso para una sociedad justa y legitima.

José Miguel Prades