Los años que vivimos peligrosamente.


 

Crónica de sindicalismo y represión en la Guardia Civil. La bibliografía sobre el movimiento sindical en la Guardia Civil española es limitada quizá por tratarse de una institución hermética. La tenacidad de guardias civiles demócratas, muchos de ellos anónimos, representa uno de los acontecimientos menos documentados de la historia reciente de España.

CUENTA A S.E.

REORIENTACION DE LAS ACCIONES

CONTRA EL MOVIMIENTO SINDICAL

CLANDESTINO EN EL CUERPO.

Con la clasificación de secreto, empieza documentalmente la Operación Columna, cuyo asunto es la planificación de la desarticulación del movimiento sindical clandestino en la Guardia Civil. Para lo cual se constituyó un dispositivo operativo especial sin escatimar medios. Entre su proceso de actuación “si se necesita provocar algún hecho para obtener una prueba, se solicitará del SCI. Ninguna Unidad emprenderá o realizará operaciones clandestinas por sencillas que se presenten” (SCI, servicio central información de la Guardia Civil).  En el “anexo nº 5” de la documentación filtrada se relaciona en forma numérica personal de las distintas zonas sobre el que se poseen pruebas informativas de su pertenencia al movimiento sindical clandestino, y en concreto III Zona (Valencia) 3 guardias del GRS, 311ª Comdª Valencia 1 brigada, 312ª Comdª Castellón 1 cabo y 6 guardias, 321ª Comdª Alicante 1 guardia. Se desarticularon comités por detención de sus cabecillas, pero la semilla estaba sembrada.

Considerando el caso de la llamada Operación Columna, puede afirmarse que la represión felipista a los guardias civiles demócratas habrá terminado cuando se logre justicia plena para todos los miembros, pretensiones e ideales que intentaron hundir y acallar por ser inconvenientes para el generalato. La represión felipista tendrá punto final cuando se haya reparado y resarcido completamente el derecho ciudadano de un guardia civil a la diferencia y al disenso. La represión felipista habrá finalizado cuando los expulsados y tantos otros que lucharon y luchan por la libertad, sean definitiva e indiscutiblemente libres. Una ley de secretos oficiales franquista impide su desclasificación. Un fenómeno silenciado e insuficientemente investigado.

Guardias civiles siguen expulsados en la actualidad por demandar derechos amparados en la Constitución. Su readmisión y resarcimiento es una deuda pendiente del Gobierno de España.


José Miguel Prades, miembro JDP AUGC Castellón y vocal GUCIPOL.

Comentarios

Entradas populares de este blog

LA PEOR INTERVENCIÓN POSIBLE

QUE NADIE ELUDA SUS RESPONSABILIDADES...

EN MEMORIA DEL AMIGO FORNET